Edward T. Topping IV, blanco, anglo y sajón, miembro de una pequeña dinastía ?es el cuarto de su familia que lleva este nombre y que ha estudiado en Yale?, va con Mack, su mujer ?también Yale? a cenar a un restaurante. Y mientras se desocupa una plaza para aparcar su pequeño y ecológico coche ?como toca a personas progresistas y cultivadas como ellos?, un esplendoroso Ferrari, conducido por una latina no menos esplendorosa y cargada de oro y oropeles, les birla el lugar. Y luego la conductora se burla descaradamente de Mack. Quizá porque, como afirma Wolfe, Miami es la única ciudad de América, y quizá del mund ...